SOBRE LA ASOCIACIÓN

El colectivo y laboratorio político Arrebol nació creyendo que la cultura política es uno de los mejores mecanismos sociales para avanzar en nuestra Democracia. Creemos firmemente en esta como herramienta para profundizar en nuestros valores. La política está presente en nuestro día a día, en casi todos nuestros actos, decisiones y posiciones, en nuestro trabajo, en nuestra relación con los vecin@s... y debe ser el único camino posible para progresar hacia una sociedad más justa, más humana, menos sectaria, que permita avanzar hacia la igualdad de derechos y obligaciones de los ciudadan@s. Nuestr@s representantes políticos hoy, más que en ningún otro momento, deben ser esencialmente ejemplares y albergar un alto sentido ético. Rechazamos profundamente el concepto pre-fascista acuñado como clase política y manifestamos nuestro deseo de que más pronto que tarde, los principales partidos del país, sean capaz de regenerarse y entender que no son los únicos propietarios de la política, aunque sí una parte importante de su representación. ARREBOL figura inscrita en el registro de Asociaciones Culturales de Castilla-La Mancha. E-mail de contacto: arp.arrebol@gmail.com

miércoles, 7 de enero de 2015

Alicante, 29/12/2014 - El presidente de la Generalitat Valenciana, Alberto Fabra (c) y el ministro de Justicia, Rafael Catalá (i), conversan con una funcionaria durante su visita a la sede de la Audiencia Provincial de Alicante cuya sede ha sido reformada integralmente 
EFE/Morell

LA NECESARIA REFORMA DE LAS INSTITUCIONES Y DE LA ADMINISTRACIÓN PÚBLICA EN ESPAÑA: REFORZAMIENTO DEL CONTROL

Hace Es obvio que el país que tenemos no es el país que queremos. La situación actual de Instituciones desacreditadas es el producto de una estructura legal diseñada, a lo largo de más de 30 años, para lograr el control político de todo el sistema.

Hoy la labor de la Administración parece consistir en una desesperada búsqueda de legitimidad en lo político mientras apuntala un orden económico de élites que tiende a prolongar una situación social de desigualdades.

Los criterios para medir la legitimidad de un sistema son múltiples, pero todos ellos confluyen en su capacidad de gozar de la aceptación ciudadana. El criterio más común es la capacidad para promover que procedimientos e instituciones sean realmente democráticos y para garantizar y respetar los derechos fundamentales de los ciudadanos.

Es en la justicia y en la recuperación del espíritu primigenio de la democracia, donde ha de encontrarse la fuente perdida de credibilidad y legitimidad de las Instituciones. No es suficiente con desarrollar la legalidad ni diversificar sus instrumentos o asegurar su autonomía relativa, hay que innovar con la audacia y la visión de largo plazo que la crisis del país exige.

Introducir limitaciones personales al continuo desempeño de cargos públicos, electivos o no, con objeto de garantizar una sana rotación en los mismos y la perpetuación en ellos de las mismas personas durante la mayor parte de su vida activa, el reforzamiento de las medidas de incompatibilidad con el ejercicio de actividades económicas en el sector privado, considerando, además, la regulación de los conflictos de intereses que pudieran surgir de las actividades privadas desarrolladas antes de acceder a un determinado cargo, o para seguir leyendo pulsa aquí 

Este miércoles, os presentamos un artículo ya publicado hace unos días en http://www.publicoscopia.com por la ciudadana Otilia Armiñana, que trabaja como funcionaria del Cuerpo Técnico Superior de Administración Civil de la Comunidad de Madrid y es licenciada en Derecho y Máster en dirección y gestión de la Administración Pública. Este acertado artículo nos sirve para abrir nuestro año de artículos ciudadanos con mucho acierto pero sobre todo de un modo propositivo, en un momento donde parece que no va quedando mucho hueco para la propuesta. Son lentejas. Muchas gracias, Oti.