ENTREVISTA A ANTONIO LUCENA PARA LA VANGUARDIA - EMILIA GUTIÉRREZ
CARTA
A ANTONIO LUCENA BONNY
Querido
Antonio:
Aún
tengo el corazón dolorido por tu marcha hacia el misterio, sea lo que fuere,
que nos espera tras el umbral de la muerte. Siempre has sido una persona
entrañablemente humilde, incapaz de aceptar que en el mundo habitan unos pocos
seres imprescindibles y que tú eras uno de ellos.
Puede
que te cueste creerlo, pero tu bondad, compromiso y coraje no son comunes. Sin
duda, tu paso por la vida ha dejado huellas imborrables sobre las personas que
tuvieron la suerte de cruzarse en tu camino, pero también sobre lugares
hermosos como nuestra provincia de Guadalajara. Tal vez haya gente que no se
acuerde de ello, pero tú fuiste un pionero del movimiento ecologista, encontrándose
en ti el germen de un sinfín de luchas justas como es el caso de la Plataforma Anticementerio Nuclear de Guadalajara , por nombrar alguna
entre tantas.
Siendo
ambos de izquierdas, hemos mantenido un cierto distanciamiento ideológico. Pensabas
que la socialdemocracia no promovía suficientemente los cambios estructurales necesarios,
que el concepto de sostenibilidad era una maniobra de distracción del sistema de
poder, pero a pesar de nuestras discrepancia siempre me has respetado, es más, me
has animado a participar políticamente como medio para transformar el mundo por
muy insignificantes que parecieran los logros conseguidos. Te voy a confesar
algo, te admiraré siempre por ser mucho más valiente que yo y atreverte a vivir
exactamente como querías y creías.
Dejas
sin referente físico a muchos y hombres y mujeres que veían en ti a un maestro ejemplar, un paradigma del activismo-coherente y humanista - contra las injusticias sociales. Sin embargo, aunque ya no estés en este plano
tridimensional, nos legas un inmenso patrimonio inmaterial, el cual se suma al dejado por otro luchador incansable, Ladis, un gran referente estatal de Ecologistas en Acción y del ámbito de las
Energías Limpias y Renovables, fallecido
recientemente y al que tanto bien debe Guadalajara.
Amigo
Antonio, gracias por tus consejos, por tu alegría… gracias por todo. Tu ejemplo
de vida, tu sonrisa afectuosa y tus ojos risueños permanecen en el corazón de
muchas, muchísimas personas. Te quiero.
Nuestro publicación semanal en el blog a
través de estas palabras de nuestra compañera Araceli Martínez, quién ha sido
la arrebolera que más momentos ha podido compartir con Antonio Lucena, hemos
querido convertirla en un humilde homenaje a un hombre esencialmente bueno que
no quiso pasar por este mundo de puntillas, adquiriendo y ejerciendo esa
ciudadanía que se tornó ejemplar.